Remedios con eufrasia para los ojos, rinitis y más

La eufrasia es una planta anual, perteneciente a la familia de las escrofulariáceas, parasitaria y trepadora con el tallo ramificado y de color rojizo, que puede llegar a alcanzar los 50 cm de altura.

Las hojas son de color verde grisáceo, ovaladas, dentadas, pequeñas y alternas.

La eufrasia tiene flores hermafroditas de color blanco con vetas púrpura alrededor del centro amarillo.

Los brotes en flor se recolectan en julio o agosto, cuando están en plena floración, y se usan frescos o bien se secan para conservarlos.

El fruto es de forma capsulada con dos compartimentos, donde se encuentran las semillas hasta que, al madurar, se abre y son expulsadas.

El nombre de euphrasia proviene del griego (Eufrosina), una de las Tres Gracias, famosas por su alegría y su risa y se cree que se bautizó con ese nombre en alusión clara a la alegría que proporciona por el pronto alivio que sienten quienes padecen problemas oculares.

Las hojas tiernas y frescas de eufrasia son empleadas en muchas partes como ingredientes de ensaladas por su sabor ligeramente amargo.

Propiedades curativas de la eufrasia

La eufrasia tiene, entre sus compuestos, glucósidos, taninos, aceite esencial, saponinas y resina, que le confieren propiedades calmantes y antiinflamatorias.

Desde el siglo XIV, se conocen sus virtudes curativas especialmente para la vista y era descrita como una fuente de “preciosa agua que clarifica la visión del hombre”. Sin embargo, en el XVI, también se bebía infusiones, vino y cerveza de eufrasia como tónicos.

En la actualidad, se emplea aún, mediante lavados oculares o compresas, para la fatiga ocular, orzuelos, reducción del lagrimeo, blefaritis y conjuntivitis.

Igualmente, en infusión, se usa para mejorar la digestión al estimular por sus componentes amargos la secreción de jugos gástricos.

Es usada, en algunas ocasiones, contra los trastornos nerviosos, dolores de cabeza, calambres e insomnio. La infusión de inflorescencias frescas alivia la fiebre del heno, la rinitis alérgica, los catarros y las infecciones bronquiales.

La eufrasia suele combinarse con sello de oro para tratar las afecciones oculares. También se puede combinar con vara de oro, flor de saúco y sello de oro para aliviar la congestión.

En homeopatía, Euphrasia officinalis es un remedio que se utiliza para tratar resfriados acompañados de secreción nasal acuosa no irritante y lágrimas frecuentes. La conjuntivitis con síntomas de enrojecimiento de ojos y labios y lágrimas acuosas y acres también se puede tratar con este remedio homeopático. También se utiliza como remedio del sarampión y las alergias.

Remedios populares

Remedio con eufrasia para la fatiga ocular Hervir una taza de agua durante 10 minutos y añadir 5 g de eufrasia. Colar y empapar un paño limpio de algodón con el líquido resultante. Aplicar, a modo de compresa, fría sobre los párpados de los ojos.

Remedio con eufrasia para la conjuntivis #1 Poner, en infusión, en una taza de agua, a partes iguales 1 cucharada de aciano y eufrasia. Colar y efectuar lavados oculares varias veces al dia.

Remedio con eufrasia para la conjuntivitis #2 Hervir por 5 minutos 1 cucharada de hojas de eufrasia y otra de hamamelis en una taza de agua. Tapar y dejar refrescar. Colar y aplicar, mediante un par de gotas en los ojos, tres veces al día.

Remedio con eufrasia para blefaritis: Hacer una infusión con 8 a 10 gramos de eufrasia en un litro de agua que esté hirviendo. Tapar y dejar reposar durante 15 minutos hasta que enfríe. Después colar y empapar una gasa que se aplicará sobre los párpados.

Remedio con eufrasia para prevenir la catarata: Verter 1 cucharadita de eufrasia en una taza de agua que esté hirviendo. Tapar y dejar refrescar. Beber una taza a diario como preventivo

Remedio con eufrasia para mejorar la digestión Mezclar 50 gr de eufrasia con 25 gr de llantén. Poner en infusión durante 10 minutos una cucharada de esta mezcla en 100 gr de agua hirviendo, Tomar una taza de esta infusión después de las comidas principales.

Remedio con eufrasia para la rinitis: Quemar un puñado de eufrasia o hacer vahos tres veces al día.

Remedio con eufrasia para la congestión nasal: Se vierte una taza de agua hirviendo sobre dos o tres cucharadas de eufrasia seca y se deja reposar durante cinco o diez minutos. Se puede tomar una taza tres veces al día. Esta infusión se puede usar también para suavizar la tos.

Remedio con eufrasia para la alergia: Mezclar, a partes iguales, eufrasia, ortiga y eupatorio. Hervir 1 cucharada en una taza de agua por 3 minutos, dejar en infusión, tapar y colar. Beber tres tazas al día.

Remedio con eufrasia para la hipermetropía: Verter en una taza de agua que esté hirviendo 1 cucharada de hojas de eufrasia. Tapar y dejar en reposo. Filtrar y verter un par de gotas en los ojos a diario durante 15 días. Descansar un mes y retomar el remedio de nuevo durante 15 días y así sucesivamente.

Si desea, puede conocer también las contraindicaciones de la eufrasia y sus efectos secundarios.