Terapia respiratoria para asma, ansiedad, bronquitis y más
Algunas personas que sufren de ansiedad nos han preguntado sobre terapias alternativas que pudieran utilizar para combatir esta dolencia. Es, nuestra opinión, que la terapia respiratoria es una de ellas, pero ésta va más allá y puede, incluso, alivar muchas más enfermedades tanto físicas como mentales.
La terapia respiratoria abarca un amplio rango de planteamientos terapéuticos que insisten en la importancia de la respiración y en su potencial para afectar a la salud humana.
La mayoría de las terapias respiratorias emplean tipos específicos de trabajos respiratorios, que se asocian a otras prácticas. Además de las mencionadas aquí, otras terapias respiratorias similares al yoga incluyen qigong y taichi.
Beneficios de la terapia respiratoria
La mayoría de las terapias respiratorias suelen emplearse para favorecer el bienestar general y corregir trastornos específicos psicológicos, físicos o espirituales. Los beneficios generales incluyen reducción del estrés, aumento de la energía y la vitalidad, y (en el caso del yoga y otras prácticas similares) mayor flexibilidad.
Las terapias respiratorias también han sido útiles en una amplia gama de síntomas específicos: asma, presión sanguínea elevada, bronquitis, dolor de cabeza y artritis reumatoide. Los ejercicios respiratorios han ayudado a muchos niños a evitar los ataques de asma y a mejorar la función pulmonar.
La terapia respiratoria ha reducido el temor, la ansiedad, el agotamiento, la hostilidad o el enojo y el riesgo de nuevos problemas cardíacos en algunas personas sometidas a cirugía cardíaca. El yoga en concreto se está empleando cada vez más como una terapia asociada al tratamiento convencional para enfermedades gra. ves como cáncer, enfermedad coronaria y sida.
Como una forma de psicoterapia, tanto el trabajo respiratorio como la meditación ayudan a corregir viejos conflictos, aumentar la autoestima y conseguir una mayor paz mental.
Además de estos beneficios, los buscadores espirituales exploran estas terapias para conseguir una mayor conciencia.
Descripción
Yoga La mayoría de escuelas de yoga incorporan ejercicios respiratorios (conocidos como pranayama) como un componente clave, junto con las posturas físicas {asanas) y, a veces, el canto o la meditación estando sentados. Quizá la forma más básica de pranayama es la respiración a tres niveles, en la que la persona primero distiende el abdomen, después la caja torácica y finalmente la parte superior del tórax antes de espirar en sentido inverso.
Otra técnica respiratoria de la práctica yóguica es la respiración alternando los orificios nasales: el aire se inspira a través de un orifico nasal y se espira a través del otro, a menudo usando la mano o el dedo para cerrar el orificio que no se emplea. Una técnica respiratoria más intensiva, que a menudo se asocia a la escuela kundalini de yoga, es la respiración de fuego, que consiste en llevar el diafragma hacia dentro y expulsar el aire rápidamente. La práctica yóguica más avanzada también utiliza diversas técnicas de respiración.
Trabajo respiratorio Hay varios tipos de trabajo respiratorio que emplean una técnica de respiración originalmente asociada al renacimiento y que se conoce como respiración conectada consciente (o circular).
Esta técnica, realizada mientras se está estirado, supone un ciclo continuo de inspiración y espiración del aire a través de la boca. La persona inspira lo máximo posible y espira de una forma natural y relajada, sin pausa entre la entrada y la salida de aire. El trabajo respiratorio holotrópico emplea una respiración profunda y rápida coordinada con ruidos y ritmos espectaculares para inducir estados psicodélicos.
Respuesta de relajación pasándose en -su estudio sobre los efectos de la meditación trascendental, el Dr. Herbert Benson desarrolló un planteamiento no religioso de la meditación que combina técnicas respiratorias, estar sentado tranquilamente y centrar la mente con el fin de conseguir la «respuesta de relajación».
Precauciones
Muchas terapias respiratorias han de practicarse en un ambiente seguro y controlado, bajo la dirección de un profesional experto o un maestro.
Como regla general, es aconsejable pedir información sobre el entrenamiento, las calificaciones y la experiencia de estos terapeutas, especialmente antes de empezar un programa riguroso y costoso basado en una terapia poco conocida.
Aunque la respiración es un proceso natural esencial para mantener la vida humana, y los ejercicios respiratorios suelen considerarse beneficiosos, son recomendables algunas precauciones. Las personas que padecen asma u otros trastornos relacionados con la respiración deben notificar a sus médicos si pretenden iniciar una terapia alternativa.
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También pueden informar al terapeuta sobre su enfermedad y los medicamentos que toman. Personas con alteraciones mentales deben tener cuidado a la hora de experimentar con prácticas diseñadas para inducir estados de conciencia alterados.
Efectos secundarios
La respiración intensa y prolongada puede producir vértigos, y la persona incluso puede llegar a marearse. A veces, las técnicas relacionadas usadas en algunas de las terapias respiratorias tienen efectos secundarios que deben tenerse en cuenta antes de iniciar un programa terapéutico.
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