Remedios para la depresión infantil y en la adolescencia

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remedios para la depresión en los adolescentes

Afortunadamente, los estados depresivos en la infancia y en la adolescencia no son tan habituales como entre los adultos. Pero aun así, se diagnostican con cierta frecuencia, más de la que cabe esperar en una edad de natural fuerza y optimismo.

El sentido común y la buena práctica psiquiátrica exigen, por otra parte, que su diagnóstico sea hecho con suficiente fundamento, con mucho tiento y cuidado porque, aun siendo cierto que hay adolescentes con verdaderas depresiones, el llegar a su diagnóstico no es precisamente una tarea fácil al alcance de cualquiera.

Dicen las estadísticas que la depresión puede afectar a casi el 2 % de los Preescolares y a casi el 5 % de los adolescentes y que uno de cada cinco niños y adolescentes visitados en las consultas especializadas de psiquiatría infantil, padece depresión.

Ahora la pregunta importante es: ¿Cuándo cabe sospechar una depresión en un adolescente? Cuando los psiquiatras hablan de depresión juvenil, no se refieren a un vago sentimiento de melancolía o de tristeza, pasajero y autolimitado, con causa evidente y fácilmente superable.

Hablan de síntomas persistentes en jóvenes que previamente no se comportaban igual y que manifiestan durante varias semanas seguidas:

Una actitud de tristeza (o de irritabilidad, que en este grupo de edad constituye también un signo de depresión),
Indiferencia o desinterés por cualquiera de las cosas que causan placer
No tienen capacidad para disfrutar y entusiasmarse por algo
Pérdida de apetito o de peso,
Insomnio casi a diario o, por el contrario, hipersomnia (dormir hasta bien entrado el día, como si comenzar la actividad diaria fuera un tormento insoportable).

En pocas palabras, son niños o jóvenes que están siempre cansados, faltos de energía con un muy bajo nivel de autoestima, poca capacidad de concentración, con sentimientos de culpabilidad por cualquier cosa e incapaces de tomar y sí mismos decisiones que a su edad debieran ser capaces de tomar.

Es importante observar que existen estudios que indican que los fármacos antidepresivos no son recomendados para tratar de aliviar las depresiones juveniles.

De ahí el interés por el mundo de la medicina natural y de las terapias alternativas con el fin de resolver el problema que se plantea el tratamiento de la depresión en los adolescentes.

Remedios populares

Remedio para la depresión infantil y en la adolescencia #1: Colocar unas gotas de aceite esencial de naranja o de otra fruta cítrica en un difusor de aromaterapia y usarlo en las habitaciones donde permanece por más tiempo el adolescente. La aromaterapia tiene un efecto positivo en la depresión en los adolescentes.

Remedio para la depresión infantil y en la adolescencia #2: Usar remedios homeopáticos como los siguientes:
• Arum metallicum para la depresión leve en adolescentes.
• Ignatia para el trastorno de adaptación.
• Natrum muriaticum para la depresión de larga duración.

Remedio para la depresión infantil y en la adolescencia #3 Verter 1 cucharada de hojas de centella asiatica o gotu kola en una taza de agua y hervir por 5 minutos. Dejar refrescar y colar. Tomar 1 taza al día.

Remedio para la depresión infantil y en la adolescencia #4 Verter un puñado de flores de lavanda u hojas de menta en 2 litros de agua y hervir por 10 minutos. Dejar refrescar y mezclar con el agua de la tina del baño. Permitir que el adolescente tome un baño con esta preparación por 15 minutos.

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Remedio para la depresión infantil y en la adolescencia#5 Frotar las manos y el cuero cabelludo con aceite de coco o de girasol. Este es un remedio antidepresivo de la medicina ayurvédica.

Remedio para la depresión infantil y en la adolescencia #6 Verter 1 cucharada de cúrcuma en una taza de agua que esté hirviendo y tomar a modo de infusión todos los días. Igualmente, se recomienda añadirlo en las comidas.

Recomendaciones

Incentivar que el adolescente realice ejercicio con regularidad.

Evitar que consuma chocolate, café, alimentos excesivamente azucarado y las bebidas alcohólicas, ya que pueden afectar aún más su estado de ánimo.

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Incentivar la ingesta de alimentos ricos en ácidos grasos esenciales los cuales reducen la depresión y refuerzan el humor.

Suministrar al adolescente alimentos ricos en vitaminas del grupo B, biotina, vitamina C o ácido fólico, ya que se consideran que mejoran los síntomas de depresión.

Permitir que expresen los pensamientos y los sentimientos en un diario, ya que es terapéutico.

Acudir a sesiones de psicoterapia Durante el tratamiento, el terapeuta ayuda al paciente a darse cuenta de sus patrones de pensamiento y de cómo se han originado. Existen diferentes subtipos de psicoterapia, pero todos tienen el objetivo común de ayudar al paciente a resolver sus problemas de salud y desarrollar habilidades.

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Acudir a sesiones de terapia lumínica Ésta es muy útil para controlar la depresión. El tratamiento consiste en la exposición a una luz de alta intensidad y/o un espectro específico durante una hora diaria a partir de una fuente de luz situada en el suelo o en una mesa. La intensidad de la luz suele ser de 10.000 lux, que es similar a la luz de un día soleado. También se puede usar lo opuesto, es decir, un simulador de sombra, para las personas que tienen una sobredosis de exposición a la luz y requieren más horas de sueño con menos luz.