Beneficios del vanadio para la salud
El vanadio es un elemento traza que ha recibido atención durante los últimos años por su posible ayuda para controlar la diabetes.
Aunque los macro-minerales, como calcio, magnesio y potasio, se han convertido en nombres de uso común debido a que constituyen más del 98% del contenido mineral del organismo, algunos minerales traza también pueden considerarse esenciales en cantidades muy pequeñas para mantener la salud y garantizar su funcionamiento adecuado.
Suelen actuar como coenzimas, trabajando en equipo junto con las proteínas para facilitar importantes reacciones químicas. Incluso sin tomar suplementos de vanadio, las personas tienen entre 20 y 25 pg del mineral en su organismo, procedentes de una dieta promedio equilibrada.
Al igual que el cromo, otro mineral traza, el vanadio se ha convertido en objeto de estudio como una posible ayuda para reducir los niveles de azúcar en la sangre en las personas con diabetes. También ha sido indicado como un posible tratamiento de la osteoporosis. Algunos deportistas y levantadores de peso lo toman para desarrollar los músculos o mejorar su rendimiento.
Los estudios en animales indican que el vanadio puede ser necesario para la formación de hueso, dientes y cartílago. También desempeña un papel en el crecimiento y la reproducción, así como en el metabolismo del colesterol y la insulina en el organismo.
No se han estudiado los efectos de una dieta sin vanadio. Aunque sus suplementos pueden ser efectivos para algunas cosas, como favorecer el control de la diabetes, los estudios en animales sugieren que las dosis necesarias de vanadio para producir efectos beneficiosos pueden resultar perjudiciales.
A menudo se necesitan dosis elevadas porque el vanadio se absorbe mal en el organismo. Todavía no se ha determinado cuál es la dosis adecuada del suplemento mineral.
El vanadio para la diabetes y la osteoporosis
El vanadio se ha investigado como una posible ayuda para controlar la diabetes. Los estudios en animales con diabetes mellitus tipo I o II indican que el vanadio mejora las cifras de azúcar en la sangre.
Los estudios con sujetos humanos han dado lugar a resultados prometedores, aunque preliminares. El vanadio es usado por algunos atletas y levantadores de peso para conseguir una mayor masa muscular a pesar del hecho de que parece no ser eficaz para este fin.
Además, la posible utilidad del vanadio para tratar la osteoporosis se considera muy especulativa. Todos los estudios en seres humanos que se han llevado a cabo han incluido un número pequeño de personas durante períodos breves de tiempo y con dosis relativamente elevadas del mineral.
La dosis estándar de vanadio, que está disponible como suplemento dietético sin receta, suele oscilar entre 10 y 30 pg al día. Sin embargo, es importante recordar que todavía no se han establecido las dosis seguras y efectivas.
Algunos expertos en medicina complementaria han recomendado dosis de 25 a 50 mg diarios en diabéticos. Los riesgos para la salud a largo plazo asociados con estas dosis son desconocidos.
Aunque no tomen suplementos, la mayoría de los adultos obtienen entre 10 y 60 pg de vanadio de una dieta normal.
Algunos expertos creen que es más seguro para las personas evitar los suplementos de vanadio y adquirir la cantidad necesaria a través de alimentos que contienen el mineral: carne, algas, cereales integrales, aceite vegetal, zumos de fruta, derivados de la soja y verduras, como guisantes, maíz, zanahorias y col.
Las bebidas alcohólicas (vino, cerveza) también contienen vanadio. La sobredosis de vanadio contenida en los alimentos no se considera un riesgo significativo, ya que el mineral sólo está presente en cantidades muy pequeñas tanto en plantas como en animales.
Precauciones
Es importante no superar la ingesta recomendada de vanadio sin supervisión médica. Los estudios realizados en ratas sugieren que las dosis elevadas pueden ser perjudiciales debido a que el mineral tiende a acumularse en el organismo y alcanzar cifras peligrosas cuando se toma en exceso.
Hay que recordar que todavía no se ha demostrado que las dosis elevadas de vanadio tengan efectos beneficiosos para la salud. Los riesgos a largo plazo asociados a la ingesta de suplementos de vanadio (a cualquier dosis) son desconocidos.
Cuando se toma la dosis recomendada, el vanadio no se ha asociado a ningún efecto secundario significativo. En dosis más elevadas, se sabe que puede producir espasmos gástricos y diarrea, además de teñir de verde la lengua.
No se conocen fármacos que interaccionen de forma adversa con el vanadio. Los fumadores pueden absorber menos cantidad del mineral.
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