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Remedios con ginseng para hipotensión, memoria y más

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remedios con ginseng


El ginseng, planta perteneciente a la familia de las araliáceas, puede llegar a medir hasta los 3 metros de altura.

Sus hojas son verdes, compuestas con cinco folíolos palmeados, y con el borde dentado.

Las flores de color amarillo o verde blanquecino son pequeñas y se agrupan en un ramillete al final del tallo, formando una umbela. Las raíces tienen forma de nabo y se desarrollan unidas de dos en dos, por lo que, visualmente, tienen un aspecto antropomórfico

Existen diferentes variedades de esta planta como  el ginseng americano, el coreano y el siberiano (eleuterococo).

El ginseng es conocido, en el oriente, desde hace más de siete mil años y apareción ya prescrita en textos chinos de dos mil años de antigüedad. En la farmacopea de Sheng Nung se considera una planta so-maténsica, es decir, que mantiene el equilibrio armónico del yin y el yang.

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Propiedades curativas

La raíz de ginseng contiene ginsenósidos, sustancias estrógenas y saponinas y además minerales, como sodio, potasio, calcio, zinc, fósforo, magnesio, hierro, y vitaminas, especialmente las del grupo B.

Para fines  curativos, se usa exclusivamente su raíz, que se recoge cuando la planta tiene, como mínimo, 7 años de edad.  Durante ese tiempo absorben todos los nutrientes de la tierra donde se cultiva, tanto es así que esta necesita descansar más de 10 años antes de volver a plantar de nuevo ginseng.

A este tipo de raíz se le llama ginseng rojo la cual es más eficaz y de mayor calidad con relación a las raíces más jovenes recolectadas que reciben el nombre de.ginseng blanco.

En cuanto a sus propiedades terapéuticas, el ginseng incrementa la concentración mental y la memoria.

Igualmente, el ginseng refuerza las defensas del organismo al aumentar la resistencia a las agresiones medioambientales (frío y calor) y patógenos (virus, bacterias…) con lo que reduce el riesgo de infecciones en invierno.

Está especialmente indicado en casos de estrés, cansancio y convalecencia y puede considerarse útil en los casos de deportistas sometidos a entrenamiento.

El ginseng activa el metabolismo e incrementa la eficacia de la insulina en personas con síndrome metabólico o diabetes tipo 2. También reduce el colesterol.

Es una planta afrodisiaca  tanto en hombres como en mujeres, seguramente por su contenido en fitohormonas,  que estimula el sistema reproductor al mejorar la capacidad y el funcionamiento de los órganos sexuales.  En este sentido, aumenta la producción de espermatozoides y ayuda a aliviar el síndrome premenstrual o los síntomas de la menopausia.

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Remedios populares

Remedio con ginseng para aumentar la concentración Verter 1 cucharada de raíz de ginseng, previamente lavada y picada, en un taza de agua que esté hirviendo.  Tapar y dejar refrescar.  Tomar dos tazas al día por un período de 15 días.  Con este remedio se mejorar notablemente la concentración.

Remedio con ginseng para la memoria:  Verter 1 cucharada de raíz de ginseng lavado y picado en una taza de agua.  Luego, hervir por 5 minutos.  Tapar y dejar refrescar.  Colar y añadir 1 cucharadita de jalea real.  Tomar especialmente si se tiene un examen o prueba académica próximamente.

Remedio con ginseng para fortalecer el sistema inmunológico Hervir 1/2 cucharadita de raíz, previamente lavada y picada, en una taza de agua durante 5 minutos.   Tapar y  dejar refrescar. Tomar una taza al día durante un mes y luego descontinuar otro mes para su posterior uso.

Remedio con ginseng para la fibrosis quística: Hervir en una taza de agua por 5 minutos 1 cucharada de raíz seco de ginseng, previamente lavada y picada.  Cubrir y dejar que se refresque.  Filtrar y beber 1 taza al día.  Este remedio reduce la patología pulmonar de la fibrosis quística si se presenta pseudomonas aeruginosa.

Remedio con ginseng para la hipotensión: Hervir medio puñadito de raíz lavada y troceada de ginseng en 1 taza de agua por 5 minuto.  Dejar reposar veinte minutos. Tomar dos veces al día hasta que la presión retorne a la normalidad.

Remedio con ginseng para el síndrome postvacacional: Verter en una taza de agua 1 cucharada de raíz de ginseng, previamente lavada y picada, y hervir durante 5 minutos.  Tapar y dejar que se refresque.  Filtrar y beber esta decocción 1 vez al día.

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Remedio afrodisiaco con ginseng  Hervir 1 g de raíz seca de ginseng en 250 ml de agua por 3 minutos.  Retirar del fuego y agregar 1 g de hojas secas de menta piperita. Tapar y dejar reposar diez minutos. Colar sobre una taza y agregar 1 cucharada sopera de miel de azahar. Tomar toda la decocción en ayunas durante un mes o mes y medio. Después no se debe volver a tomar, por lo menos, en dos o tres meses.

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Precaución

No consumir ginseng si se está embarazada o es madre lactante. Igualmente se debe evitar si se sufre de hipertensión, taquicardia, insomnio, hiperestrogenismo, síndromes febriles y estados de ansiedad.

No combinar ginseng con suplementos de hierro, ya que este mineral interfiere con los principios activos del ginseng, disminuyendo su efecto terapéutico. Tampoco hay que asociarlo con excitantes como café y té.

Es importante no sobrepasar las dosis adecuadas para no provocar irritabilidad y no debe tomarse antes de ir a dormir.

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Pautas de crecimiento

La planta de ginseng se puede propagar a partir de semillas o esquejes de raíces.

Para crecer en forma saludable, la planta de ginseng requiere un suelo rico, constantemente húmedo y bien drenado, con un nivel de pH ideal de 5.0 a 6.5.

El ginseng prefiere sombrear a lugares con sombra parcial, y una temperatura promedio de 50 ° F (10 ° C).

Si se cultiva ginseng a partir de semillas, éstas deberán someterse a un proceso de estratificación, que requiere humedad y bajas temperaturas.

Las semillas o raíces de ginseng se deben plantar a una distancia de 14 a 18 pulgadas (35 a 45 cm).

La planta de ginseng rara vez es afectada por plagas; sin embargo, puede ser atacado por las babosas.

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