Remedios con vulneraria para heridas, resfriados y más

La vulneraria es una planta herbácea bienal o perenne de hasta 80 cm de altura que pertenece a la familia de las leguminosae (emparentada con el meliloto y el trébol; de allí que algunos lugares reciba también el nombre de trébol amarilloa).

Esta planta crece en terrenos calcáreos de Europa, Oriente Próximo, norte de Africa y América.

Tiene un tallo pubescente, erecto o tendido y ramoso y las hojas son pecloladas, compuestas plnnadas, con folíolo terminal, oval y alargado, sedosas al tacto y de color verde grisáceo.

La vulneraia posee flores amarillas o rojas anaranjadas, blancas o coloreadas por partes, dispuestas en cabezuelas apretadas y de tipo papilionáceo. Florecen de abril a septiembre. El fruto es una pequeña legumbre ovalada.

Propiedades curativas

Las flores de la vulneraria contienen taninos, azúcares, flavonoides y pigmentos antociánicos. Las hojas llevan taninos, saponinas, xantofila y mucílagos.

Se utiliza como astringente, antivomitiva y vulneraria. El término vulneraria nos indica el efecto principal de la planta, que es el de facilitar la cicatrización de las heridas; propiedad reconocida desde tiempos remotos.

En este sentido, se usan las hojas frescas machacadas y aplicadas sobre las heridas. Hay que lavar antes en agua fría, para despojarla bien de la tierra que pudiera tener.

Igualmente, se puede usar seca para hacer un cocimiento con dos puñados en un litro de agua con el cual se lavará las heridas.

La infusión de sus hojas, se usa, además, para hacer gargarismos, en el tratamiento de aftas bucales, ulceras aftosas o inflamaciones de la boca y, en forma de compresas, para el tratamiento de eczemas, forúnculos y otras afecciones dermatológicas.

Remedios populares

Remedio con vulneraria para cortaduras y heridas: Coger unos 100 g de hojas frescas, lavarlas bien y machacarlas hasta conseguir una pasta homogénea.

Esta cataplasma se aplica sobre la parte afectada y se sujeta con una venda. Se cambia 2 o 3 veces al día. Ayuda a cicatrizar más rápidamente las heridas.

Remedio con vulneraria para las contusiones y golpes: Poner en infusión 100 g de flores frescas en 1 litro de agua. Dejar reposar durante 20 minutos y colar por expresión. Se hacen de 3 a 4 lavados durante el día, se colocan sobre las llagas compresas humedecidas en el líquido y se sujetan con una venda.

Estos lavados se efectúan principalmente al acostarse (el primero), y el segundo cuando se va a comenzar la caminata. Los otros se hacen al mediodía y por la tarde.

Remedio con vulneraria para llagas en la piel, escaras y úlceras cutáneas Cocer durante 5 minutos en 1 litro de agua 100 g de hojas y raíces bien lavadas.

Después dejar reposar durante 10 minutos y colar. El líquido se emplea para hacer lavados sobre las partes afectadas, y para preparar compresas humedecidas en el líquido, poniéndolo sobre la úlcera y sujetándola con una venda. Cambiar de compresa 2 o 3 veces al día.

Remedio con vulneraria para resfriados, catarros o tos: Poner en infusión durante 15 minutos 250 cm3 de agua con una mezcla a partes iguales (15 g o 2 cucharadas) de las flores de la vulneraria y las hojas del llantén mayor.

A continuación, colar y añadir 2 cucharadas de miel. Tomar todo al acostarse. Por la mañana, en ayunas, se toma otra dosis. También se suelen emplear las flores secas, unos 5 g por cada 250 cm3de agua.